BLOG VECINAL ORIENTADO A LA DEFENSA DE LA CALIDAD DE VIDA DE QUIENES VIVIMOS EN EL NOA Y EN PARTICULAR EN LA HERMOSA CIUDAD DE SALTA "LA LINDA".
Contra los monocultivos y minería contaminantes y a favor de la Soberanía Alimentaria y de un Proyecto Nacional Sustentable

28 de diciembre de 2010

MODELO NEOCOLONIAL: ACAPARAMIENTO DE TIERRA, MONOCULTIVOS Y EXCLUSIÓN SOCIAL




MODELO NEOCOLONIAL: ACAPARAMIENTO DE TIERRA, MONOCULTIVOS Y EXCLUSIÓN SOCIAL

El modelo de agro exportación de commodities, una agricultura extractivista y minera que actualmente se ha impuesto en la Argentina, suma veinte millones de hectáreas sembradas con soja transgénica, lo cual representa más de la mitad de la superficie agrícola del país. Esta agricultura de monocultivo industrial, que ya lleva veinte años, tuvo como objetivo, en principio, proveer forrajes para las producciones de carnes en encierro tanto en Europa como en China, así como harinas y subproductos industriales de la producción de aceites. Tras dos décadas de padecer este monocultivo, las consecuencias económicas, sociales, culturales, ambientales y sanitarias para la Argentina, son devastadoras. Es un modelo de agricultura, que impone la exclusión o la marginalidad social y la pobreza. El modelo de sojización ha afectado, no solamente los agro ecosistemas mas frágiles en el norte, sino que, algunos estudios indican también, importantes pérdidas de fertilidad en la pampa húmeda. Estas tierras que históricamente han caracterizado la riqueza de la Argentina y han construido en el imaginario de nuestro pueblo y del mundo, una idea de opulencia alimentaria, ya están convirtiéndose en un mero mito, gracias a la sobre exigencia a que se encuentran sometidos sus suelos, que ayudados por las recurrentes sequías y vientos, consecuencias de la deforestación, del maltrato productivista y de los cambios climáticos, amenazan convertirse en un nuevo Dust Bowl, tormentas de tierra en sequía y por agriculturización excesiva, con desaparición de la cobertura vegetal autóctona protectora del suelo, uno de los desastres ecológicos más importantes del siglo XX.[1]

La producción de commodities se complementó con la instalación de los agronegocios como eje de poder que reconfiguró la economía. Los agronegocios son uno de los principales núcleos de poder de las corporaciones que dominan el Cono Sur. Estas corporaciones comparten el territorio con las transnacionales mineras y petroleras. Las actividades de los agronegocios y las industrias extractivas, constituyen el eje estructural y el origen de los principales conflictos sociales y ambientales en la región sudamericana. Los agronegocios son el motor que mueve la violencia y la criminalización de las comunidades campesinas e indígenas que luchan por su tierra. Ellos se extienden con estrategias que conducen a la destrucción de las mismas bases de vida de la población rural y de las generaciones venideras.

El boom de la soja transgénica ha provocado la especialización en la producción y exportación de unos pocos productos primarios, subordinando el país a los vaivenes de la economía mundial y del capital financiero especulativo. Y aunque los commodities fueron favorecidos en los mercados, el futuro continúa siendo imprevisible. La creciente dependencia a los mercados globales ha generado una sociedad de servicio y de gran inseguridad alimentaria, en que los planes sociales reemplazan el trabajo productivo. De haber sido un importante proveedor de carnes y cereales para Europa durante gran parte del siglo XX, y siendo autosuficiente de los alimentos que consumía su propia población, en la actualidad, la Argentina ha pasado a ser un país básicamente productor de transgénicos y exportador de forrajes. Se redujo, cuando no se eliminó por completo, la producción de otros cultivos, provocando serios deterioros en la seguridad alimentaria. Por otra parte, como consecuencia directa del poder en los mercados de las corporaciones transnacionales, la producción de alimentos ha quedado subordinada a los cultivos de transgénicos para la exportación, originando un fenómeno de dependencia del país respecto de los mercados globales, las empresas exportadoras y otras corporaciones que, como Monsanto, no sólo proveen la semilla, sino también el paquete tecnológico, que integran fertilizantes y agrotóxicos.

Este modelo es responsable de la desaparición de la agricultura familiar y de los trabajadores rurales. Miles de ellos son expulsados violentamente de sus tierras y de sus fuentes de trabajo para imponer el paquete tecnológico de la siembra directa y las semillas GM, y son criminalizados por resistir los desalojos y el avance de la soja. Considerando la expulsión de trabajadores rurales y campesinos de los territorios donde se cultiva, el promedio de trabajadores que quedan, sumado a los del brevísimo trabajo temporario de los de los contratistas de maquinaria agrícola, no es más de un trabajador cada 500 Has. Condenados al éxodo rural, las poblaciones pasan a engrosar los cordones de pobreza de las grandes ciudades, convirtiéndose en consumidores rehenes de lo que el mercado les impone a través de las cadenas agroalimentarias y el supermercadismo a la vez que transformándose en cautivos del asistencialismo clientelar y una enmarañada red de punteros políticos, crimen organizado, trata de personas e iglesias destinadas a la contención y al control social de las periferias de pobreza extrema.

El crecimiento de la soja está íntimamente ligado al deterioro ambiental. Su expansión está ocasionando la deforestación de extensas áreas, en particular en las provincias del norte. Cada año se desforestan en la Argentina más de 200 mil hectáreas de monte nativo, debido al avance de los monocultivos que afectan grave e irremediablemente a la Biodiversidad. Muchos hábitats naturales, tales como bosques, humedales o estepas, junto con especies de plantas y animales, fueron eliminados o corren peligro de extinguirse. Otras de las consecuencias de la deforestación, son el importante aumento en la incidencia de varias enfermedades zoonóticas como consecuencia de que los vectores y patógenos quedaran sin sus hábitats naturales y han debido colonizar los poblamientos urbanos. Ahora, esas enfermedades, afectan a las economías familiares y a los presupuestos en salud del Estado, agregando un factor de estrés y de gastos que es ignorado y permanece invisible dentro de las ecuaciones del mercado.

El empobrecimiento sistemático de nuestros suelos y la creciente desertificación, es otra de las graves secuelas que deja la soja, los otros cultivos genéticamente modificados y las zonas con forestación implantada y en escala. Pero la consecuencia más siniestra siguen siendo los modos en que este modelo de monocultivos ha impactado en la salud de cientos de miles de pobladores que viven cercanos a los campos de soja. Nuestra población está siendo afectada en forma directa por las fumigaciones de agrotóxicos produciéndose cáncer, leucemia, lupus, púrpura, alergias de todo tipo, malformaciones en recién nacidos, abortos y demás enfermedades vinculadas a la afectación del sistema inmunológico. A esto se suma el caso de numerosas muertes producidas por intoxicaciones. Esta situación se repite a lo largo de todo el Cono Sur, los relatos acerca de envenenamientos y desalojos, amenazas y asesinatos se producen no sólo en la Argentina, también en Brasil y Paraguay.

Según ensayo “Agricultura, alimentación, biocarburantes y medio ambiente” de diversos autores, en la Revista económica ICE de Madrid: “La agricultura y la alimentación se configuran globalmente como un reto pendiente de solución: la sexta parte del mundo pasa hambre y la población mundial y el cambio en las dietas van a elevar sustancialmente la demanda de materias primas agrarias. El mundo, pese a todo, cuenta con recursos suficientes, tierra y agua, para alimentarse, pero requiere más inversión en capital y tecnología, una regulación mejor y más justa del comercio y la mitigación de las causas de la pobreza. La producción de biocarburantes comporta una nueva demanda para la agricultura, compitiendo por los mismos recursos con la producción de alimentos”.[2] Lo que con seguridad incrementará la expansión del actual modelo de agricultura industrial y semillas GM, es el cada vez mayor interés de los países ricos por cortar su petróleo con combustibles provenientes de la agricultura. Con el surgimiento del mercado de agrocombustibles, el futuro de la producción agrícola se torna todavía más pavoroso porque nos amenaza conducirnos a una catástrofe de carácter irreversible. Múltiples organizaciones sociales han expresado su preocupación por las consecuencias que puede generar este nuevo modelo de energía, donde la agricultura estará el servicio de producir alimentos para motores. En el Cono Sur de la América Latina, el sector sojero se promociona como el gran abastecedor de biodieseles para el mercado europeo. Para América Latina esta actual ola de expansión de la agricultura industrial, amenaza lo que resta de población rural y las últimas zonas de producción de alimentos. Una de las consecuencias directas de estas políticas, es que cada vez, mayores sectores de la población de menores o escasos ingresos, tienen acceso a una alimentación adecuada debido a los altos precios de los alimentos básicos (frutas, verduras, carne, leche).

La soja no es un mero cultivo, la soja es un sistema global que condiciona e impone políticas de Estado. Lo que en un momento se denominó como agricultura sin agricultores, en realidad fue el comienzo de un arrebato masivo del territorio por parte de las corporaciones y que actualmente culmina en la desolación de un pueblo privado de sus suelos y del arraigo a la tierra, de su seguridad alimentaria y en consecuencia, de su Soberanía Alimentaria.

La tierra en América Latina: el talismán de las corporaciones

La crisis alimentaria mundial y la crisis financiera de 2008, reconfiguraron el mapa mundial de los más poderosos. Los negociantes de los mercados globales salen a buscar nuevos objetos de especulación, especialmente tierras fértiles, agua y alimentos, además del oro, metales estratégicos y cuencas hidrocarburíferas. Son capitales corporativos que no sólo buscan dar respaldo tangible a sus divisas vacías de valor, sino que, adictos a las fábulas del “crecimiento”, descubren ahora que no pueden alimentar a su propia población y buscan enclaves en propiedad o arriendo. Es el caso de China. Sus tierras agrícolas están desapareciendo ante el avance industrial y sus suministros de agua se encuentran en estado crítico. Con más de 1.8 billones de dólares de reservas en divisas, China cuenta con bastante dinero para invertir en su propia seguridad alimentaria en el extranjero. Y es lo que está haciendo, no sólo en Asia y en África. Ahora también logró instalarse en la Argentina.

La provincia de Río Negro en la Patagonia argentina, le asegurará de esa manera a China la provisión de comida durante 20 años, según lo acordó el gobernador rionegrino, Miguel Saiz, en su reciente visita a ese país, con una de las mayores empresas de alimentos, la estatal Beida Yuang. El convenio consiste en que Río Negro alquile a productores de su provincia campos para que allí Beida Yuang instale sistemas de riego que permitan la plantación de soja, trigo y colza, entre otros cultivos que la empresa se encargará de comercializar en la provincia china de Heilongjiang. En una primera etapa experimental, que comenzará de inmediato, Beida Yuang invertirá 20 millones de dólares para irrigar y producir en 3000 hectáreas de campos alquilados. Pero el proyecto consiste en llegar a una inversión de 1.450 millones en 20 años y sobre 320.000 hectáreas. Beida Yuang quiere asegurarse alimentos e insumos para producción de carnes en China por 20 años, donde sólo el 10 por ciento de las tierras son productivas y en el que cada año millones de personas se van del campo a la ciudad.

La jugada de China se ajusta a una época de Globalización en la que los precios de los alimentos son altos y los de la tierra son bajos. El negocio sería el de tener control sobre muchas de las mejores tierras cercanas a suministros de agua. La tierra será la nueva fuente de lucro y, el objetivo: controlar la producción de alimentos e insumos alimentarios para la producción de carnes en su territorio. Es en este punto donde el sector privado juega un rol esencial. No serán pocas las transnacionales y corporaciones que se lancen a la caza de tierras fértiles para la producción de lo que el mercado global les demande, ya sean alimentos o Agrocombustibles. Según nos informa Infobae del 14 de Octubre de este año, otro tanto estaría haciendo Qatar que, está implementando conversaciones preliminares con el Gobierno argentino, para instalar proyectos agrícolas destinados a la producción de cereales a fin de asegurarse el abastecimiento de alimentos, y está dispuesto a comprar tierras en Argentina por valor de unos 100 millones de dólares. [3]

Las semillas de Monsanto y los pooles de siembra: una nueva agricultura

El argentino Gustavo Grobocopatel, fundador y presidente de la compañía Los Grobo, considerado el empresario número uno y referente indiscutido a nivel mundial en el terreno de la soja, hace dos años pasó a formar parte de Sollus Capital, un grupo de inversión que tiene por finalidad adquirir tierras cultivables en el Cono Sur. Conocido como “el rey de la soja”, Grobocopatel cultiva más de 280.000 hectáreas, de las que unas 120.000 son en la Argentina y el resto en Brasil, Uruguay y Paraguay. Hoy sus ventas superan probablemente en mucho el millar de millones de dólares en cada campaña. La familia Grobocopatel, de origen ruso-judío llegó a la Argentina en 1912, proveniente de Berasabia, al sur de Rusia. Se instalaron en una colonia judía de Carlos Casares, un pueblo a 300 kilómetros de Buenos Aires. Allí comenzaron a realizar distintas tareas como contratistas agropecuarios. En el año 1984, Gustavo Grobocopatel funda junto a su padre Los Grobo Agropecuaria. En ese entonces era tan sólo una empresa familiar, en donde trabajaban 4 personas en la administración, disponían de un camión y una oficina en un taller reformado, que cumplía funciones de depósito, en la localidad de Carlos Casares.

En 1986 se produjeron dos hechos concurrentes y vitales para la expansión de la empresa familiar: inflación e hiperinflación y paralelamente la inundación en la zona oeste de la provincia de Buenos Aires. Ambos eventos dejaron secuelas agronómicas y económicas financieras. En esos años muchos productores abandonaron la producción y muchos campos se ofrecieron en alquiler. La experiencia agronómica y de relaciones comerciales consolidada en Los Grobo Agropecuaria facilitó el desarrollo de una incipiente red de agronegocios por contratos. Esta experiencia los motivó a seguir sembrando fuera de los campos propios. Así fue que los efectos de la hiperinflación y las secuelas de las inundaciones les permitió a los Grobocopatel, realizar diversas operaciones de compra y venta de campos. Pero el verdadero salto cualitativo se produce durante los años noventa. Con la llegada a la presidencia de Carlos Menem en 1989, se inaugura lo que luego se conocería como neoliberalismo. Las privatizaciones y el desmantelamiento del Estado generan el campo propicio para la expansión de los agronegocios. El propio Gustavo Grobocopatel sintetizó así lo que significó la década del noventa para su mega empresa: “El único camino posible fue el crecimiento en escala y la eficiencia. La década de la convertibilidad originó inmensas oportunidades anticipándose a los acontecimientos. Los aumentos de precios de granos se aprovecharon porque estábamos muy posicionados en la producción. La caída de muchos competidores, primero acopios locales y la liberación de tierras de muchos productores que se retiran de la actividad, se tradujo en oportunidad para nosotros”.

Con la incorporación del sistema de siembra directa primero, y con la de las semillas transgénicas después, Gustavo Grobocopatel comienza a ser portavoz de lo que él denomina el nuevo paradigma: “la sociedad del conocimiento”. En esos años la empresa eleva exponencialmente su producción de granos. En el año 2001 la familia Grobocopatel funda “el Grupo Los Grobo” y se consolida como uno de los principales grupos económicos de la Argentina. Los Grobo es una empresa que produce granos, los acopia, los procesa y presta servicios para la producción y la industria alimentaria en el MERCOSUR. Dentro de la cadena de valor de la actividad, la empresa está vinculada desde la investigación biotecnológica y la genética vegetal, hasta la comercialización de harinas y subproductos de la molienda. Su principal característica es que no compra tierras sino que las arrienda, es decir que usa la tierra de otros, bajo el convencimiento de que en una época de capitales líquidos no tiene sentido congelarlos en la propiedad de tierras sino dinamizarlos en el uso. De esta manera nacen los llamados pooles de siembra que rápidamente se extienden por todo el territorio de la sojización, imponiendo la escala y el abaratamiento de costos. Pero asimismo expresa Grobocopatel en estas prácticas y desde el principio, un claro liderazgo, una vocación de sumar a muchos a un proyecto que denomina nueva agricultura y sociedad del conocimiento. Él mismo lo explica: “…La nueva agricultura, con campesinos transformados en emprendedores, en proveedores de servicios, con hijos en las universidades o escuelas técnicas, con condiciones de trabajo calificadas, creo que es lo mejor para toda la sociedad. Hay más empleo, pero alocados en diferentes lugares, menos productores, más proveedores de servicios, más industrias. El impacto sobre la sociedad está estudiado incipientemente, pero los primeros resultados son optimistas. En un reciente trabajo encargado por Naciones Unidas se comprobó que diferentes grupos de interés vinculados con Los Grobo han ganado en autonomía, empleabilidad (que para mí es más importante que el empleo), enprendedurismo y liderazgo. Una sociedad más libre, más creativa, con más capacidad de adaptarse a los cambios, con más acceso al conocimiento. Por supuesto que esto no basta. Tenemos que tener un Estado e instituciones fuertes, robustas, que faciliten, que estimulen, que den igualdad de oportunidades.”[4]

La mejor definición del Grupo Los Grobo se encuentra descripta en su publicación en Internet denominada Visión[5], donde se destaca que la compañía es una empresa de producción y procesamiento de granos, pero fundamentalmente, de servicios. La empresa, desde la localidad de Carlos Casares en la pampa argentina: Los Grobo Agropecuaria S.A Argentina, año1984, se ha extendido agresivamente a los EEUU y a Bradil. En el 2008, el Grupo Los Grobo S.A. informó que los capitales del Fundo de Investimento em Participações PCP (Brasil) y PCP LP (Islas Cayman) ingresaron como accionistas del Grupo Los Grobo. “El grupo argentino Los Grobo comenzó el proceso de unificación de sus operaciones de granos en Brasil. Con presencia en ese mercado desde el año pasado, el Grupo concentrará su actividad en CEAgro, que pasará a ser su marca en el país. Fortalecido por la incorporación de dos nuevas actividades, CEAgro se propone facturar unos u$s 360 millones en 2010. Con la reestructuración y una inversión no revelada, considerada "poco significativa" para el grupo, Los Grobo Brasil se convirtió en el principal accionista de CEAgro. La cuota inicial del 35%, adquirió a mediados del año pasado, se amplió a 59,5%. El paranaense, Alberto Paulo Fachin, que fundó la CEAgro en 1994, obtiene el otro 40,5%, y sigue como presidente de la compañía. El 66,6% de las acciones de Los Grobo Brasil están en manos de Grupo Los Grobo, en el que la participación de la familia Grobocopatel es mayoritaria con un 76,64%. Vinci Partners, a través del fondo PCP, dos ex socios del Banco Pactual, tienen el 21,56% del Holding y el 33,3% de Los Grobo Brasil”.[6]



La expansión sobre el Cono Sur de los grandes grupos sojeros argentinos ligados a las empresas agroexportadoras como Cargill y Bunge, se produce durante la llamada Crisis del Campo, en el transcurso del segundo semestre del año 2008[7]. En su libro sobre la mafia Judía, Fabián Spollansky nos dice sobre el grupo Elsztain lo mismo que podría afirmarse sobre otros grandes grupos y pooles sojeros: “La gran masa de productores en negro, aquellos a los que el propio fisco no incorpora deliberadamente, se ve obligada a realizar operaciones a pérdida que para intermediarios, acopiadores y cerealistas exportadores son ganancia redonda. Eso motivó el larguísimo paro granario en rechazo a la política fiscal del gobierno, que a los cerealistas no les significó absolutamente ningún riesgo ni mucho menos, costo adicional. Encabezados por la mafia Elsztain, trajeron 4 millones de toneladas de saja del Paraguay que llegaron a Rosario en convoyes de balsas por la Hidrovía del Paraná. La larga huelga agraria produjo desabastecimiento y, a la vez, un tremendo desprestigio del gobierno, pero los grandes cerealistas silenciosamente, siguieron ganando dinero y consolidaron su expansión en todo el MERCOSUR. La mafia Elsztain avanza rápidamente en el territorio sojizado. Lo obtenido como ganancia extraordinaria con la crisis lo utilizará para extender sus latifundios en Goiás y en el Matto Grosso. Pero así como se sirve del fisco para extorsionar a los más débiles del circuito productivo, pasa por sobre este cuando se trata de lavado de dinero. El domingo 22 de junio del 2008 se conocieron detalles del lavado de divisas de la Argentina, realizado por grandes capitalistas, noticia que fue difundida por el diario Crítica, en una nota del director de ese medio, Jorge Lanata, que reproducimos íntegra en el apéndice. Uno de los principales lavadores de dinero es Marcos Marcelo Mindlin, socio y amigo de Elsztain. Operaba por medio de JP Morgan, y uno de los ejecutivos de esta banca, Hernán Arbizu, denunció las maniobras en Estados Unidos y en la Argentina.[8]

Los Grobo: posicionándose en las nuevas tecnologías

Asimismo el Grupo los Grobo ha generado una empresa líder en el área de Biotecnología y clonación de animales que se denomina Bioceres, una sociedad inversora en la que agrupa y lidera a más de doscientos emprendedores agropecuarios. Asimismo, mediante Bioceres y más precisamente mediante INDEAR, un instituto de agro biotecnología dependiente de Bioceres, ha concertado importantes acuerdos con las instituciones científicas del Estado Argentino para determinar las políticas oficiales en el área de investigación y desarrollo, a la vez que capitalizar esos avances científicos para el sistema de agronegocios biotecnológicos que lidera.



Grobocopatel se ha definido públicamente a sí mismo como un “sin tierra” ya que sólo es dueño del veinte por ciento del total de las tierras que cultiva, el resto son arrendadas. Con respecto al éxodo rural al que se ven arrastrados miles de campesinos como consecuencia del avance de los agronegocios, el llamado “rey de la soja” sostuvo que “La agricultura sin campesinos es parte de un nuevo paradigma vinculado con trasformaciones en la sociedad. Es un proceso que observamos desde la década del ’40, no está asociado a una ideología y no afecta sólo al campo; también hay muchas industrias con menos obreros. Por supuesto que las políticas aceleran o retrasan el proceso y lo pueden hacer más o menos equitativo, pero es inevitable y, desde mi punto de vista, positivo más allá de los temores que despierte”.

Hoy Los Grobo se han posicionado como el cuarto grupo molinero del país detrás de Cargill, Navilli y Lagomarsino y el tercer grupo exportador a Brasil. A partir del año 2008, con la incorporación de socios extranjeros, se transformó en una verdadera transnacional. En Febrero del 2008 el holding de Los Grobo incorporó, a través de un aumento de capital por 100 millones de dólares, al fondo de inversión Fundo de Investimento em Participações PCP, ex propiedad del banco suizo UBS, y actualmente perteneciente al grupo financiero brasileño Pactual Capital Partners, ahora denominado Vinci Partners. En mayo del 2008 el Grupo Los Grobo, junto a PCP y a Touradji Capital Management se unieron para formar parte del grupo de inversión Sollus Capital. Touradji Capital Management es una administradora de hedge funds (Fondos de Cobertura, fondos de inversión especulativos de algo riesgo que buscan elevadas rentabilidades) con sede en Nueva York y especialista en investigación fundamental e inversiones activas en commodities y valores vinculados a ellos. Actualmente, la empresa administra activos de más de US$ 3,5 mil millones. La página web oficial de Sollus Capital define así esta sociedad: “La alianza entre PCP, Touradji y el Grupo Los Grobo es una combinación poderosa con una posición única para capitalizar la atractiva dinámica de tierras agrícolas en América del Sur”.

Y más adelante señala lo que se puede considerar un resumen del principal objetivo de esta alianza: “Sollus Capital está estructurada para capitalizar la valorización potencial de tierras de cultivo en Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay. Sollus pretende identificar y adquirir tierras a través de una completa red de agentes de campo de los recursos propios de Los Grobo y Sollus. La empresa pretende adquirir tierras subdesarrolladas, comenzar su desarrollo y dejar que Los Grobo aumenten su valor con la implementación o mejora del "ecosistema" regional de agronegocios. Este "ecosistema" incluye servicios de consultoría, tecnología, infraestructura utilizada para el almacenamiento y distribución de insumos, financiamiento y servicios de hedging (cobertura), y apoyo logístico ofrecido a agricultores de las regiones aledañas. Después de mejorar el ecosistema de agronegocios y de que el valor creado sea reconocido en los precios de las tierras, la empresa pretende venderlas y lucrar con su valoración”.

Los Grobo no están solos… siguen sumando aliados

Según el diario La Nación del 31 de Octubre de 2010: “El buen momento que viven las commodities agrícolas despertó el interés de los inversores internacionales por el campo argentino. Una semana después de que la empresa Los Grobo sumara un socio minoritario brasileño, Cresud, la compañía agropecuaria del grupo IRSA, anunció una ampliación de su capital con la que busca captar 300 millones de dólares. Ayer, Eduardo Elsztain, el número uno del grupo IRSA, y su hermano Alejandro, presidente de Cresud, encabezaron la presentación formal de la oferta pública, tras obtener la aprobación de la Comisión Nacional de Valores y la Securities and Exchange Commission (SEC), el organismo regulador de los mercados de capitales en los Estados Unidos. Durante la presentación, los Elsztain adelantaron que los fondos obtenidos con la ampliación de capital serán destinados a financiar el plan de expansión de Cresud en el mercado argentino y a potenciar su presencia en el exterior. Hasta el momento, la división de negocios agropecuarios del grupo sólo está presente en Brasil y su objetivo es extender sus operaciones a otros países de la región, como Uruguay, Paraguay y Bolivia”.

A su vez Brasil Agro[9], había anticipado hace pocas semanas la intención de la empresa CRESUD, propiedad del hombre más rico de la Argentina, Eduardo Elsztain[10], a su vez tesorero del Consejo Judío Mundial, de sumarse como empresa a las actividades que desarrollan Los Grobo y Sollus Capital. La noticia dice lo siguiente: “…Cresud construye un puente entre BrasilAgro y Sollus. A argentina Cresud está plantando a semente de uma operação que poderá dar origem à maior controladora de propriedades agrícolas do país. O cultivo começou a ser feito há dois meses, com o aumento da sua participação no capital da BrasilAgro. Após comprar as ações em poder da Tarpon Investimentos e se tornar o maior sócio individual da companhia, com 40% das ordinárias, o grupo portenho caminha agora na direção do conterrâneo Gustavo Grobocopatel, um dos principais nomes do agronegócio na Argentina. O objetivo da Cresud é costurar a associação entre a BrasilAgro e a Sollus, controlada por Grobocopatel, pelo fundo Pactual Capital Partners (PCP) e pelo private equity norte-americano Touradji. Um dos caminhos para a fusão entre as duas empresas seria um cruzamento societário entre os atuais acionistas, sem a necessidade de aporte financeiro. Do lado da BrasilAgro, além da própria Cresud, outro personagem importante neste enredo é o empresário Elie Horn, dono da Cyrela e um dos principais acionistas da empresa. Seu imprimatur seria decisivo para a negociação. Horn, um dos fundadores da BrasilAgro, tem forte ascendência sobre a miríade de fundos de investimento que integram o capital da empresa. Procuradas pelo RR - Negócios & Finanças, a BrasilAgro e a Sollus negaram a associação.
A fusão entre BrasilAgro e Sollus resultaria em uma empresa com mais de 240 mil hectares de terras no país. Levando-se em consideração o plano de expansão já em curso nas duas companhias, esta nova holding poderia chegar ao fim do ano com uma carteira de mais de 340 mil hectares em propriedades rurais, superando a atual líder do setor, a Tiba Agro. A empresa teria ainda terras na Argentina, com o carry over dos ativos da Los Grobo e dos irmãos Alejandro e Eduardo Elsztajn, donos da Cresud. A eventual associação é um reflexo do poder que a Cresud ganhou ao aumentar sua participação no capital da BrasilAgro. Além da aproximação com Gustavo Grobocopatel, o grupo argentino é também um dos idealizadores da emissão de ADRs programada pela companhia. Independentemente da operação com a Sollus, dentro da própria BrasilAgro a expectativa é que a maior ingerência da Cresud vai se refletir na gestão da companhia, inclusive com a possível troca de executivos indicados pela Tarpon Investimentos (Relatório Reservado, 6/7/2010).

La sumatoria y la articulación entre las fuerzas de Eduardo Elsztain, Gustavo Grobocopatel y sus respectivas empresas en la Argentina y en el Cono Sur, pueden ser trágicas para el porvenir de nuestros países y sumamente difíciles de contrarrestar, en especial debido al respaldo que estas Corporaciones suelen contar por parte de los diversos gobiernos progresistas de la América Latina.



Especulación con los alimentos y avalancha del acaparamiento de tierras



Con el acaparamiento de tierras por parte de las corporaciones, los agricultores y las comunidades locales inevitablemente perderán el acceso a la tierra para la producción local de alimentos. Se está entregando la base misma sobre la cual construir la Soberanía Alimentaria. En marzo de 2010 el GRAIN difundió un documento en el que afirma que: “Se dice como excusa que en muchos casos las tierras no se venden sino que se rentan, pero qué propicia más la devastación sin miramientos de las tierras: ¿que se vendan, o que se renten por… noventa y nueve años? Al final de tales contratos, los “inquilinos” regresarán a una tierra agotada, erosionada, contaminada, a la cual será muy difícil recuperarle su fertilidad, y ellos simplemente se mudan a nuevas tierras “disponibles”.



Este proceso que hemos descripto amenaza convertirse en una verdadera catástrofe para nuestros pueblos, en la medida en que las corporaciones transnacionales redireccionan el flujo de capitales financieros errantes desde la crisis de los mercados inmobiliarios, hacia las zonas de agricultura en América del Sur y en África. La consecuencia será la devastación de los ecosistemas naturales sometidos a procesos productivos que agotan rápidamente los frágiles equilibrios en zonas como la Patagonia y el Norte argentino. Otra consecuencia importante será la pérdida de la soberanía nacional sobre vastos espacios que funcionarán como enclaves extra territoriales a la vez que, como bolsones de producción sometidos a las demandas de intereses externos, en detrimento de los Estados nacionales y de sus responsabilidades de mantener la integridad y la soberanía de sus propios espacios. La decisión sobre la vida y los bienes comunes quedarán en ese caso, en manos de quienes concentran el manejo de las producciones, constituyéndose gobiernos paralelos, a la vez que mutilándose el cuerpo de la Nación.



Con estas nuevas formas de apropiación se acentúa la tendencia al despojo de las poblaciones criollas, campesinas e indígenas que por decenas de años han estado arraigadas en esos territorios y que las obligará a migrar a las periferias de los centros urbanos. Las fronteras nacionales se desdibujarán como consecuencia del acaparamiento de las tierras agrícolas, tornando inaplicables las leyes y reglamentaciones que protegen nuestros espacios, desertizando vastos territorios y agotando las escasas fuentes de agua. En el documento de las FAO: Perspectivas para el medio ambiente, podemos leer: “… parece probable que el calentamiento global beneficie a la agricultura de países desarrollados situados en zonas templadas y que tenga efectos adversos sobre la producción de muchos países en desarrollo situados en zonas tropicales y subtropicales. Por tanto, el cambio climático podría aumentar la dependencia de los países en desarrollo de las importaciones y acentuar las diferencias existentes entre el norte y el sur en cuanto a seguridad alimentaria”.[11]



Este sombrío panorama constituye una realidad en marcha. Los mega emprendimientos agroindustriales se unen y consolidan avanzando sobre los territorios y sobre nuestras vidas, mientras las burguesías y los gobiernos operan como meros facilitadores del despojo, obnubilados por las ganancias inmediatas y sin considerar las graves consecuencias que soportarán las generaciones de argentinos aún no nacidas. El acaparamiento de tierras es en definitiva, la nueva etapa de un proceso de neocolonización que en su momento nos obligó a producir forrajes y aceites de soja, más tarde a producir agrocombustibles para los automotores de Europa, y que ahora se manifiesta y profundiza sobre los amplios territorios despoblados por el modelo anterior, con la constitución de enclaves agro productivos, por parte de ciertos países necesitados de solucionar su crisis alimentaria, en este caso a costa del hambre, del desarraigo de nuestras propias poblaciones y en detrimento de nuestra Soberanía Nacional.



GRR Grupo de Reflexión Rural

Octubre - Noviembre de 2010




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[1] http://es.wikipedia.org/wiki/Dust_Bowl

[2] http://www.revistasice.com/cmsrevistasICE/pdfs/ICE_847_41-57__D22088E3FFF96C7A09B33666F54EF033.pdf

[3] http://www.infobae.com/notas/nota.php?Idx=541491&IdxSeccion=101275

[4] http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-151221-2010-08-13.html

[5] http://www.losgrobo.com.ar/nuestra-empresa/vision.html

[6] http://www.losgrobo.com/index.php/news/view/id/32

[7] http://www.haceteamigo.com.ar/web-@PW-conflicto-campo-agro-gobierno-argentina-kirchner-delia-angeli.asp

[8] http://www.fabianspollansky.com.ar/novedades.php

[9] http://www.brasilagro.com.br/index.php?noticias/detalhes/9/28824

[10] http://www.taringa.net/posts/noticias/5714157/El-Hombre-Mas-Rico-De-La-Argentina---Eduardo-Elsztain.html

[11] http://www.fao.org/docrep/004/y3557s/y3557s11.htm

Fuente: F:\GRR - Grupo de Reflexión Rural-3-9-10.mht

24 de diciembre de 2010

Pesticidas: se cierra el año sin una ley clave

ESQUIVANDO LA MAREA: Sojización... y después?-Parte II




ESQUIVANDO LA MAREA: Sojización... y después?: "Extenso informe que publica enREDando, continuamos abordando las consecuencias nocivas del actual modelo productivo basado en el monocultivo..."

Fuente:http://www.enredando.org.ar/noticias_desarrollo.shtml?x=62238

1 de octubre de 2010

Veladero

Los medios técnicos disponibles actualmente permiten que empresas mineras multinacionales de gran envergadura produzcan modificaciones irreversibles en el medio ambiente que pueden afectar grandes regiones obligando a que los asentamientos poblacionales centenarios existentes deban migrar a centros urbanos.

15 de junio de 2010

Soberanía alimentaria, Monsanto y Wal Mart


El artículo que sigue a continuación nos brinda una idea muy concreta de como se mueven los grandes Pools de alimentos y nos alerta sobre el riesgo de convertirnos en una sociedad dependiente de la provision de alimentos desde fuera de nuestro territorio sin control sobre la calidad de los mismos ni sobre los costos.

No habrá Monsanto sin Wal Mart, ni política de control de la alimentación mundial sin ambos. Andar nuevos caminos… sin olvidar el anterior
13-06-10 Por Sergio Daniel Verzeñassi

La salud de los ecosistemas define la salud de sus poblaciones. El origen de la enfermedad está en la intersección de la biología con la sociedad. La dinámica biológica de un ecosistema dice de la habitabilidad de un territorio. La mayoría de las enfermedades están provocadas por el daño ambiental. Por primera vez en la historia de la humanidad, nuestros hijos tendrán condiciones socioambientales y de salud, peores que la de sus padres. Por primera vez en la historia, el mundo que reciben nuestros hijos está escandalosamente mas vulnerable e impredecible que el que recibimos sus padres.

“Entre quienes deben decidir si se construirá una calle, una usina o una fábrica que destruirá para siempre la belleza de todo un amplio paisaje, las consideraciones estéticas no juegan papel alguno. Desde el intendente de una pequeña comunidad hasta el ministro de economía de un gran Estado, existe total unanimidad de criterios en cuanto a que la belleza natural no merece sacrificio alguno de orden económico – ni tampoco político. Los escasos científicos y defensores de la naturaleza que tienen los ojos abiertos para ver la desgracia que se aproxima carecen completamente de poder. Algunos de los terrenos allá arriba a la vera del bosque aumentarán sus precios de venta si hay una calle que conduce hacia ellos, y así el encantador arroyuelo que serpentea a través del pueblo resultará entubado, enterrado y tapado, con lo cual el hermoso camino del pueblo terminará convirtiéndose en una horrenda calle de los suburbios de la ciudad.” - (Konrad Lorenz....”Los ocho pecados mortales de la humanidad civilizada”)

La Dra. Rauni Kilde, ex Ministra de Sanidad de Finlandia, ha señalado a la muy difundida pandemia de la Gripe A, como una estrategia de guerras demográficas disimuladas, diciendo sin ambigüedades: “…la meta de la que he leído, de la “Elite”, -si puedo usar esa palabra-, es la de reducir nuestra población en el planeta Tierra en al menos dos tercios, quizá incluso 5 billones;… No es la gripe porcina lo que es peligroso. Son las vacunaciones... detrás de todo ello está el reducir la población mundial, porque es muy tóxico… y para meter millones y millones en los bolsillos de aquellos que las saquen (los que produzcan la vacuna)… Rumsfeld (Donald) es propietario también de una de las grandes compañías farmacéuticas,... y desde que quieren reducir la población, han empezado a decir que los críos y las mujeres embarazadas son los primeros (a vacunación obligatoria en una pandemia grado 6)… Eliminar la próxima generación… El objetivo es deshacerse de tanta gente como sea posible… En la reunión de los Bilderberg, -el 14 0 15 de Mayo, este año 2009-, en Hellas, casi hubo una división, cuando estaban discutiendo ésto. Y puedo bien imaginar que la gente que normalmente asiste, no siempre está de acuerdo con el plan del Sr. Kissinger para eliminar a una gran parte de la población mundial…” (1)

Por otro lado, la austríaca Jane Bürgermeister ha iniciado una causa penal contra el laboratorio Baxter International, y señalado a la Organización Mundial de la Salud como partícipe en presunta complicidad, indicando que sería parte de un mismo objetivo de limitación demográfica mundial, por debilitamiento inmunológico de quienes sean inoculados con la misma vacuna. Señala esta mujer,-con un coraje ignorado por el mundo-, un hecho criminal del mismo Laboratorio, que aún estando advertido, en el año 2006, distribuyeron hemoderivados con VIH y hepatitis C entre miles de pacientes adultos y niños europeos.(2)

Otro tanto de inciertos, -o muy ciertos según se mire-, ocurre con los alimentos producidos con organismos modificados en su genética, que se comercializan libres de avisos ni señales. Los “lobbystas” de las empresas biotecnológicas, atentos a cualquier intento que pretenda legislar el etiquetado obligatorio, lo bloquean y desaparece.

La misma Dra. Rauni Kilde agrega, “…ya conoces a las compañías americanas- pero con comida genéticamente modificada y cosas así, no sabemos y nadie sabe qué va a ocurrir... porque ellos experimentan con un largo alcance y no sabemos lo que ocurrirá en un año o en veinte años,… así como no sabemos qué ocurre, -aunque empezamos a saberlo ahora-, con los teléfonos móviles de aquí a veinte años. Ya sabes, causan tumores cerebrales, ceguera y sordera y cáncer y lo que sea... es algo totalmente,… totalmente conocido ahora.”

La nueva llegada de Wal Mart a Paraná no es una noticia comercial. Ni tendrá como consecuencias el desplazamiento de los almacenes barriales. Ni es la “competencia leal para la atracción de inversiones” que le asigna algún distraído presidente local de un partido político (3) a este gigante devorador de la comercialización masiva del mundo.

Denunciada como una de las empresas de mayor responsabilidad en la explotación del trabajo infantil en el planeta, Wal Mart se encuentra en la etapa final de un movimiento estratégico para alcanzar la exclusividad del comercio alimentario en los países de América Latina. Viene a terminar de cerrar la operación de compra-hostil a Carrefour.

Noticias que anuncian un día y desmienten al siguiente, son ruidos que piedras traen. (4) El objetivo es el dominio de la distribución de alimentos. Alimentos producidos con organismos genéticamente modificados. Se ha decidido consolidar el “no control” de lo que ingerimos; ni permitir la competencia de producciones locales. Vienen a impedir posibles comercios demandantes de lo local. La localía, el vecindario, los “entre nosotros”, los que saludan al llegar, esa es la “resistencia” que se pretende eliminar.

Wal Mart es el mundo globalizado. Es la Organización Mundial de Comercio.

Walt Mart es el Consenso de Washington con sus claros objetivos: privatizar el mundo. Privatizar la vida. Consumar la barbarie de la homogenización cultural global. El empobrecimiento económico, político, social y cultural de millones, disfrazado de colores, luces y góndolas del “compre mucho”. Lo necesario, y lo que no. Como dijera eufórico el gerente de uno de los primeros supermercados en arribos por aquellos años terribles de la década anterior: ”Es increíble lo que se puede hacer comprar a la gente en estos espacios, sin que lo necesiten…”. Y a precios bajos. El desconocido alto costo de los precios bajos.

Wal Mart viene a completar el circuito iniciado por Monsanto en los desiertos verdes del modelo agrícola. El modelo de los transgénicos y glifosatos, endosulfanes, gramoxones y surfactantes temibles y arrasadores. Viene a legitimar mediante imposición alimentaria, la “República Unida de la Soja”, aquella famosa publicidad de Syngenta. Viene a comercializar los granos alterados de Monsanto, sin cuestionamientos ni exigencias de etiquetas indicadoras de transgénesis en nuestros alimentos.

Las góndolas del hiper-supermercadismo alejan y dificultan la soberanía alimentaria; ahogan y eliminan la producción y comercialización local, barrial, de vecinos, de amigos. Viene a dificultar los comienzos de la naciente “economía del abrazo” como la define Paco Puche, la “economía del amor”, la economía “que tiene que ver con la mayor o menor felicidad que aporta al conjunto de la población”. La economía de la amistad y las confianzas mutuas. (5) Así es que los cierres de comercios barriales no serán una consecuencia más de esta nueva llegada. Vienen para eso. Es la razón principal.

Wal Mart es eliminación de competidores en la comercialización masiva de alimentos. Monsanto es la producción masiva de transgénicos. Y es el control de las semillas del mundo.

Estas llegadas son el modelo de “el mundo según Henry Kissinger”. Es el mundo ordenado por los mandantes de los Bush; y los Rumsfeld.

Wal Mart es una estrategia de ocupación territorial. Desde la dominación alimentaria. Como avisa la ex ministra de salud de Finlandia, la Dra Rauni Kilde. Hay un plan de eliminación de población mundial. Los alcances para la salud humana de los alimentos transgénicos no han sido probados. Monsanto ha logrado sortear los controles de sus productos y cultivos, con una escandalosa práctica de “dobles funcionarios”, que se desempeñan en las agencias de reglamentaciones de los EE.UU. y son al mismo tiempo directivos de la empresa. La llamada política de la “puerta giratoria” o “revolving doors”. En “El mundo según Monsanto”, Marie Monique Robin muestra documentando, la impunidad con que se manejan las aprobaciones de productos que luego se ofrecen como insumos de producción agrícola, o como alimentos transgénicos. George Bush como presidente de los EE.UU., ha sido un “lobbista” principal de Monsanto para dichas aprobaciones. Donald Rumsfeld, el ex Secretario de guerra norteamericano, fue presidente de Searle, del grupo Monsanto. Ann Veneman, Secretaria de Agricultura de Bush, fue integrante del directorio de Calgene Pharmaceuticals, adquirida por Monsanto. Y así, una lista para no ignorar al momento de entender el tema de las aprobaciones.

La política mundial de los alimentos es un arma de control demográfico. La producción de alimentos y su comercialización, son una para la otra. No habrá Monsanto sin Wal Mart, ni política de control de la alimentación mundial sin ambos.

Esa es la nueva llegada de Wal Mart.

Además de ahogar a los almacenes de esquinas y barriales, viene a no dejar alternativa de consumo para los alimentos transgénicos de Monsanto. Es un objetivo de alto significado político.

Para incorporarnos al mundo en venta, y gestar el endeudamiento fraudulento de la década infame de los años ‘70”, en marzo de 1976, se violentó la vida institucional. José Alfredo Martínez de Hoz fue Ministro de Economía de la tragedia y el terror en Argentina. Desde entonces, ese tramado agobiante y perverso, continúa dando algunos de sus frutos pretendidos.

“El neoliberalismo es un arma de conquista. Anuncia un fatalismo económico contra el cual toda resistencia parece vana. El neoliberalismo es como el SIDA: destruye el sistema inmunitario de sus víctimas.

En realidad el fatalismo de las leyes económicas oculta una política paradójica, pues se trata de una política de la despolitización.” (6)

Cada año, desde el retorno de la democracia, en la semana de la identidad y la memoria, algunos “olvidos” que habilitan llegadas de Wal Mart y Monsanto, recuerdan y repiten “Nunca Mas”. Paradojal muestra de inmunodeficiencia política.

El 16 de mayo de 1997, el presidente Clinton pidió “perdón” a 400 “cobayos humanos” portadores de sífilis que no recibieron tratamiento. Nunca les dieron la penicilina necesaria. El objetivo era observarlos y registrar qué ocurría con la enfermedad, cuando no era tratada. Todos eran negros. Para convencerlos, les ofrecieron comida y transportarlos gratis los días en que los estudiaban y “medicaban”. 40 de ellos contagiaron a sus esposas. 28 murieron por la enfermedad, y 100 hicieron complicaciones secundarias. (7)

¿Cuántos de estos “ensayos” se realizan en el mundo actual, a escala territorial?

De esos escenarios reales, que ese mundo muestra sin rubor ni disimulo, -lo que los hace mas graves aún por su cinismo-, ¿cuánto consideran nuestros gobiernos para la decisión de cómo habitar y territorializar la ciudad? ¿Qué se sabe, qué se intercambia y reflexiona en el Consejo Deliberante, en la Comisión de Código Urbano, en la Comisión Mixta de Turismo Municipal, o en las reuniones de las áreas ejecutivas municipales, cuando se autorizan instalaciones de comercios que tienen su decisión y definición política en los directorios de las corporaciones transnacionales?

¿En qué piensan cuando se habilitan las llegadas de los Wal Mart? ¿O los cambios de funcionalidad del Mercado Central por un Shopping? ¿Cuál es el futuro del ecosistema que nos sostiene, en intervenciones de bordes costeros como la siempre amenazante propuesta termal, con derrames inevitables de aguas con salazones incompatibles? ¿Cuál es el impacto sobre las poblaciones depuradoras y regeneradoras de faunas y floras vitales, las de los controles larvarios de vectores del dengue, la fiebre amarilla, o la malaria, entre tantas otras funciones sabidas o desconocidas aún?¿Cuál es la evaluación socio-ambiental de los bordes costeros? ¿Qué falta para comprender la significación ecosistémica trascendente y el privilegio natural de nuestra ciudad con sus trazados de arroyos interiores, abiertos, despejados de basuras, no entubados, ni mugrientos y abandonados como se han permitido dejarlos? ¿Cómo se entiende el abandono del Parque Nuevo, si no es desde la sospecha de una actitud premeditada, que busca la “licencia social” para ofrecer emprendimientos seductores, diseñados por los negocios inmobiliarios sobre los espacios públicos, presentados en “powerpoint” animados y musicalizados, deslumbrando al “analfabetismo socioambiental”?

Celebrar la llegada a la ciudad de un Shopping, es un descuido. Mirando más en detalle, está ahí nomás del desatino. Si a ello se agrega que el lugar elegido es el viejo y extraordinario Mercado Central, y la concesión es por 30 años, es todavía más serio. Son tiempos de crisis energéticas e hídricas mundiales y propias, y toda la precaución y cuidados a redescubrir para modificar los hábitos del consumo actual, es un imperativo de urgencias.

Estamos en tiempos de finales y emergencias por agotamientos.

Son los temas principales de las agendas del mundo.

“El objetivo es generar un proyecto de aspirancia para los segmentos de menor poder adquisitivo... hay segmentos masivos que van ciertos días,… y después los mas selectivos, los mas acotados… Un proyecto con un “aspiracional”(¿?) para los del medio,… y un sofisticado para que consuman los de mayor nivel.”

Un espacio de convivencias entre los que miran,… y aspiran a poder… y los que compran… porque pueden... en otros momentos, para evitar las molestias de tanta gente en el lugar.” (8)

¿Qué es eso? ¿Un aporte a la sociedad inclusiva? ¿Una propuesta de superación de las odiosas exclusiones y divisiones entre “los que están”… y aquellos que deben creer que están?

¿Es deseable consolidar esta marcha del consumismo como anhelo y esperanza de felicidad social, que ya tiene final y está en “caminos de vuelta” en el planeta?

“Las raíces del consumismo pueden ser poco profundas y, por lo tanto, vulnerables, pero la acción individual y la simplicidad voluntaria no parecen ser medios capaces de desarraigarlo. Entonces, ¿qué debemos hacer? ¿Excavar para extraerlo? Quizá la respuesta esté en la combinación de lo político y de lo personal. Para rejuvenecer la ética de la suficiencia debe emerger una masa crítica de individuos comprometidos con esa vida. Y si han de tener éxito, deberán equilibrar sus esfuerzos para cambiarse a sí mismos, con un programa audaz para modificar las leyes, las instituciones y los intereses que se benefician con el derroche.

Después de todo, los valores son creaciones sociales además de individuales, y solo son efectivos para restringir y orientar nuestra conducta, cuando los respalda la fuerza de las instituciones sociales.” (9)

El Mercado Central es un espacio extraordinario para las nuevas estrategias de consumos locales de producciones propias. Frutihortícolas orgánicas, libres de agrotóxicos, producidos en cinturones verdes periurbanos rescatados de la soja y los transgénicos. Y de lácteos controlados con pasteurizaciones en escala pequeña o mediana. Recuperar los tambos de proximidad. Las tecnologías ya existen. Estos son los anuncios de llegadas tecnológicas que deben estar en las políticas públicas de los tiempos que asoman. Son las tecnologías apropiadas, las propuestas por Schumacher en su “economía de la permanencia”. (10) Pescaderías y carnicerías de producciones locales. Hay que recuperar la agricultura de consumo alimentario urbano. Con hortalizas y frutas producidas con técnicas de “manejo integral de plagas”. Incorporar la ciudad al Movimiento Mundial por Alimentos Libres de Agrotóxicos. Alimentos seguros, con bajo impacto de traslados por demandas de combustibles.

“En un intento de luchar contra el transporte de larga distancia de alimentos, las comunidades de algunos países industriales están buscando maneras creativas de refortalecer las conexiones con los granjeros locales. Para esto refuerzan la noción de los pobladores de las ciudades de que están unidos al medio ambiente que habitan. Hay un nacimiento de los mercados de granja -comunes en el Tercer Mundo- en los países industrializados. Los mercados de granjeros acortan la distancia del campo a la mesa, y así, ahorran energía y reducen las necesidades de envases. También reducen los desperdicios de alimentos en una quinta parte, porque la gente no tiene problemas en comprar productos de forma o tamaño irregular a los granjeros, productos que rechazaría en los estantes estériles de un supermercado” (11)

Producir en el Sur, para consumos del Norte. Los cargueros “SuperPanamax” recorriendo miles de kilómetros con primeras marcas, es el proyecto de la OMC y las corporaciones. El cultivo de las necesidades es una empresa mundial de proporciones gigantescas. “Es nuestro trabajo hacer que la población sea infeliz con lo que tiene”, decía un director del departamento de publicidad de la Allies Store Corporation, hace cuarenta años. Es así como los traficantes de mensajes ofrecen ayuda a quienes nacen con las pestañas cortas y finas.” (12)

Pero los derroches y superfluos, son derechos adquiridos por el 15% de la población mundial que se engullen el 80% de los recursos, y producen otro tanto de residuos e inmundicias intratables. Esos son los presentes proyectados al futuro que se pretenden consolidar. Para eso nos precisan inadvertidos, entusiasmados en jugar a “ser lo que no somos”.

¿Se contextualizan estos escenarios en las decisiones que se toman en la ciudad? ¿Hay algo de estos contextos en los informes de aprobaciones y excepcionalidades de la Comisión de Código Urbano? De ésto, ¿no se habla? ¿No corresponde considerar qué está ocurriendo en el mundo mientras se define la ciudad? Y el mundo corporativo, el que nos observa por el agua que tenemos, por nuestras tierras y clima, por la sociedad que somos; el mundo que toma decisiones, el que elige las cuencas de sus producciones globales y sus rutas de traslados, y las áreas de producción de los forrajes de sus ganados, y de sus materias primas celulósicas, y mineras, ese mundo, ¿acciona entre nosotros?

¿Alguien consideró el valor del hipódromo en la limpieza y barrido de gases fotoxidantes sobre la calle Almafuerte? ¿Qué epidemiología urbana hace el seguimiento de la calidad del aire en la zona?

¿Qué estudio de “impacto en cuenca”, por colección de pluviales hizo el proyecto inmobiliario y shopping anunciado en esas 20 hectáreas, en pleno corazón de la ciudad? Quitarle terrenos permeables a una gran cuenca de colección pluvial, ¿qué provoca en las calles colectoras y en el sumidero final de la misma, es decir en los márgenes y laderas de los arroyos “Colorado”, “Culantrillo”, o en el bajo de Almirante Brown, casi Díaz Vélez? ¿Serán los futuros derrumbes urbanos, como el alud de barro y piedras en la calle Estrada, de la madrugada del viernes 6 de febrero?

Toda artificialidad urbana es un reduccionismo biológico y cultural. Es un empobrecimiento del sistema. Una ciudad con nuevos supermercados o hipermercados, que disvalora ferias de intercambios y comercios de producciones locales, es una ciudad que desciende escalones hacia pobrezas mayores. No se trata de bolsillos. Es una pérdida de espacios y entornos con capacidades productivas que agregan o preservan culturas y saberes. Las quintas de periferia urbana, la agricultura, la horticultura y fruticultura urbana son bienes a conseguir, a revitalizar, no a superar o eliminar. No seremos más felices con las llegadas de frutas exóticas o productos de “marcas-vanguardia”. No son las bananas ecuatorianas o las paltas peruanas de las góndolas del consumo selecto lo que asegurará alimentos continuados y seguros.

Son las naranjas de nuestros suelos entrerrianos. Son las paltas de nuestra propia ciudad, -aún no relevadas por ninguna dependencia municipal, y hasta despreciadas a veces por sus frutos en caídas inoportunas, como el sacrificado paltero de Tribunales- las que esperan ser advertidas y recreadas en ferias barriales, con fiestas culturales que comuniquen las preparaciones posibles. Son los montes a recuperar en periferias. Son miles de pequeños productores de una nueva política de producción local en terrenos de una nueva política de suelos para los comienzos de horticulturas-fruticulturas biológicas y limpias.

La salud de los ecosistemas define la salud de sus poblaciones.

“El origen de la enfermedad está en la intersección de la biología con la sociedad.” (13)

La dinámica biológica de un ecosistema dice de la habitabilidad de un territorio.

La mayoría de las enfermedades están provocadas por el daño ambiental.

“Por primera vez en la historia de la humanidad, nuestros hijos tendrán condiciones socioambientales y de salud, peores que la de sus padres.”(14)

Por primera vez en la historia, el mundo que reciben nuestros hijos está escandalosamente mas vulnerable e impredecible que el que recibimos sus padres.

Nunca habían muerto y enfermado tanta gente joven de cáncer.

Nunca habían muerto y enfermado tantos niños con leucemias y linfomas.

Están dañados los sistemas que nos sostienen. Están golpeados en su vitalidad nuestros campos y ciudades.

Elevando la voz pues no la escuchan, la Madre Tierra retoma la palabra.

Llueve en las altas cuencas y se inundan los valles aluviales y las islas.

En su expresar y en nuestro comprender, andan los remansos desordenados, reordenando generosos y sabios.

Que nuestros hijos no carguen con la desgraciada voz de la condena.

El río hablando, hace decir a la Tierra. Nosotros escuchando, somos la Tierra que se advierte.

“…ojalá que pronto esto suceda… así podrá descansar la pena… hasta la próxima vez… Seguro que otra vez estaremos volando…inventando una esperanza….para volver a vivir…” Litto Nebbia. www.ecoportal.net

Sergio Daniel Verzeñassi - Argentina- Integrante del Foro Ecologista de Paraná - Red Nacional de Acción Ecologista

Notas:

(1) La Dra. Rauni Kilde habla sobre la conspiración…www.youtube.com

(2) es.wikipendia.org/wiki/Jane_Burgermeister

(3) El Diario -11/08/2009- pág.5 - Primera sección

(4) La Nación 1º/10/09 - Economía & Negocios

(5) Paco Puche - Prólogo al libro de Federico Aguilera “La nueva economía del agua”

(6) Pierre Bordieu citado por Jean Ziegler - “Los nuevos amos del mundo”

(7) La Nación -16/05/1997- “Clinton pedirá perdón a “cobayos humanos”

(8) Entrevista al empresario del shopping anunciado - El Diario 29/10/2009

(9) Alan Durning -Worldwatch Institute- “Cuando diremos basta”

(10) E.F.Schumacher - “Lo pequeño es hermoso”

(11) Alan Durning - “Cuando diremos basta”

(12) Alan Durning - “Cuando diremos basta”

(13) Giovanni Berlinguer - Globalización y salud global

(14) Trailer del documental "Nuestros hijos nos acusarán"

Fuente: http://www.ecoportal.net/content/view/full/93619

22 de febrero de 2010

¿Cuál es la importancia de la educación ambiental?





18-02-10 Por Cristian Frers

Más allá de la educación tradicional, es decir, del simple hecho de impartir un conocimiento, la educación ambiental relaciona al hombre con su ambiente, con su entorno y busca un cambio de actitud, una toma de conciencia sobre la importancia de conservar para el futuro y para mejorar nuestra calidad de vida. La adopción de una actitud consciente ante el medio que nos rodea, y del cual formamos parte indisoluble, depende en gran medida de la enseñanza y la educación de la niñez y la juventud. Por esta razón, corresponde a la pedagogía y a la escuela desempeñar un papel fundamental en este proceso.

En su definición sobre Educación Ambiental, las Naciones Unidas nos indica que ésta tiene como objetivos la formación de los individuos para conocer y reconocer las interacciones entre lo que hay de natural y de social en su entorno y para actuar en ese entorno. Intentando no imprimir a sus actividades orientaciones que pongan en grave deterioro el equilibrio que los procesos naturales han desarrollado, haciendo posible la existencia de una calidad ambiental idónea para el desarrollo de la vida humana.

Es necesario abordar la temática del cuidado del medio ambiente con la seriedad necesaria para poder revertir los hábitos que causaron daños, hasta la fecha, a nuestro planeta. Es necesario incorporar la idea que con el correr del tiempo y manteniendo comportamientos perjudiciales hacia el ambiente vamos perdiendo la oportunidad de tener una mejor calidad de vida, vamos deteriorando nuestro planeta y a los seres que habitan en él.

Es evidente la necesidad de sensibilización desde cada uno de nosotros, para repensar en qué valores y actitudes, se acoda el cambio cultural que debemos asumir, con respecto a las problemáticas ambientales.

Más allá de la educación tradicional, es decir, del simple hecho de impartir un conocimiento, la educación ambiental relaciona al hombre con su ambiente, con su entorno y busca un cambio de actitud, una toma de conciencia sobre la importancia de conservar para el futuro y para mejorar nuestra calidad de vida.

La adopción de una actitud consciente ante el medio que nos rodea, y del cual formamos parte indisoluble, depende en gran medida de la enseñanza y la educación de la niñez y la juventud. Por esta razón, corresponde a la pedagogía y a la escuela desempeñar un papel fundamental en este proceso.

La educación ambiental es un proceso educativo, integral e interdisciplinario que considera al ambiente como un todo y que busca involucrar a la población en general en la identificación y resolución de problemas a través de la adquisición de conocimientos, valores, actitudes y habilidades, la toma de decisiones y la participación activa y organizada.

El niño crece y se desarrolla bajo la influencia de un complejo proceso docente-educativo, en el que la escuela cumple un encargo social que tiene el objetivo de que el futuro ciudadano reciba enseñanza y educación, y se integre a la sociedad en que vive de una manera armónica, formado política e ideológicamente en correspondencia con los principios de nuestra sociedad. En este sentido hay que educar al niño para que ocupe plenamente el lugar que le corresponde en la naturaleza, como elemento componente de ésta. Él debe comprender que es parte integrante del sistema ecológico y que, como tal, tiene deberes que cumplir.

La formación y el desarrollo de hábitos correctos en los estudiantes, en lo concerniente a la protección del medio ambiente en la escuela y sus alrededores, contribuyen a vincular la teoría con la práctica y a familiarizarlos con estas tareas y exigencias a escala local. Esto facilita que comprendan la importancia de la protección del medio ambiente y sus distintos factores, a nivel regional y nacional, y cómo una sociedad puede planificar y controlar la influencia del medio ambiente en beneficio de la colectividad.

Aprovechar estos temas, que son contenidos de la enseñanza escolar pero con un fin, que no sea solo el de la información, que se transgreda ese límite. Que llegue hasta la formación de un ciudadano conciente e involucrado en esta problemática.

La necesidad de abordar la problemática ambiental requiere de una perspectiva que involucre la crítica de los distintos saberes y el desarrollo del conocimiento humano para la creación de alternativas. De ahí que, además de los obstáculos económicos y sociales dados por el estilo de desarrollo para abordar la problemática ambiental, las posibilidades de revertir los procesos de deterioro ambiental se ven también limitados por la propia conformación del proceso educativo y de construcción del conocimiento.

Es necesario abordar el estudio de lo ambiental en lo educativo desde una perspectiva sistémica. Debemos estar conscientes que la conceptualización de educación ambiental abarca contenidos de varios campos: conservación, equidad, contaminación, ambientes urbanos/rurales, derechos humanos, ecología, ciencias ambientales, educación integral, población, energía, pobreza, ética, desarrollo sustentable, sociedad, tecnología, calidad de vida, entre otros. Además, que dichos campos se entrecruzan y se traslapan. Debemos entonces concretar qué relaciones, interacciones, resultados o consecuencias nos interesa descubrir y posteriormente comunicar.

Desde el Estado es necesaria la incorporación con carácter obligatorio de la materia educación ambiental en favor de las generaciones futuras y una adecuada calidad de vida.

La educación ambiental en la Argentina está poco más que en pañales, pese a los esfuerzos y los planes oficiales que se están tratando de implementar, tanto en el Ministerio de Educación de la Nación como en los organismos equivalentes de las provincias, debido a: La falta de conexión entre las medidas individuales que se implementan y la problemática social, el carácter temporal de las acciones propuestas (no conducen a la formación de hábitos), no se permite desarrollar la creatividad de los sujetos, ya que no hay continuidad entre el contenido que se transmite y las concepciones y representaciones de los sujetos y para finalizar, la falta de la información sobre los problemas locales en conjunción con la problemática nacional. La asistencia oficial es escasa o prácticamente nula. Esto se debe, principalmente, a la precaria importancia que frecuentemente se da a la educación, tanto desde el estado como otros sectores de la sociedad, se traduce como una contracción del sistema educativo público, como efecto de un presupuesto bajo y la ausencia de un debate acerca de la calidad y beneficios de la educación impartida.

Esta educación trasciende el ámbito formal de la educación tradicional, no circunscribiéndose únicamente a los centros educativos, sino empleándose, también, en el ámbito laboral, en la empresa o el centro de trabajo, siendo éste un excelente vehículo para comunicar valores a favor del ambiente, relacionándolo con las características productivas. Por otra parte, el desarrollo eficaz de la educación ambiental demanda el pleno aprovechamiento de todos los medios públicos y privados de que la sociedad disponga, a través de diferentes sistemas y subsistemas de aplicación, vinculándose con la legislación, las políticas, los planes y programas de ejecución, las medidas y mecanismos de control y a todas las decisiones que los gobiernos adopten respecto al ambiente.

Se debe estimular la formación de sociedades socialmente justas y ecológicamente equilibradas, que conserven entre sí una relación de interdependencia y diversidad.

La educación ambiental, en el contexto del desarrollo sostenible, debe generar con urgencia, cambios en la calidad de vida y mayor conciencia en la conducta personal, así como armonía entre los seres humanos y de éstos con otras formas de vida.

La aplicación de la educación ambiental no consiste, entonces, en una mera aplicación de ajustes y complementos a los programas tradicionales de la educación, se trata, más bien, de convocar a nuevos enfoques, nuevos contenidos y nuevos métodos, haciendo más flexibles las tradicionales estructuras de los sistemas educativos. www.ecoportal.net

Cristian Frers – Técnico Superior en Gestión Ambiental y Técnico Superior en Comunicación Social – Argentina

Fuente:http://www.ecoportal.net/content/view/full/91171
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